Con la llegada del verano, las temperaturas suben y, aunque disfrutemos del sol, es crucial recordar que nuestras mascotas son especialmente vulnerables al calor. Un golpe de calor puede ser fatal para ellas, por lo que la prevención y el conocimiento son vitales.

¿Por qué el calor afecta tanto a las mascotas?

A diferencia de los humanos, que sudamos por toda la piel, los perros y gatos regulan su temperatura principalmente a través del jadeo y de las almohadillas de sus patas. Este sistema es mucho menos eficiente, lo que los hace propensos a sufrir rápidamente los efectos de las altas temperaturas. Razas braquicéfalas (hocico chato) como los bulldogs, pugs o persas, animales con sobrepeso, cachorros y mascotas mayores, son aún más susceptibles.

Señales de alerta de un golpe de calor

Es fundamental reconocer los síntomas para actuar a tiempo. Si observas alguno de estos signos, tu mascota podría estar sufriendo un golpe de calor:

  • Jadeo excesivo y muy ruidoso: Mucho más intenso de lo normal.
  • Salivación abundante y espesa: Pueden aparecer burbujas.
  • Encías muy rojas o pálidas y pegajosas.
  • Dificultad para moverse o tambaleo.
  • Vómitos o diarrea.
  • Apatía, confusión o desorientación.
  • Convulsiones o pérdida de conocimiento en casos graves.

¿Qué hacer ante un golpe de calor?

Si sospechas que tu mascota está sufriendo un golpe de calor, ¡cada minuto cuenta!

  1. Llévala inmediatamente a un lugar fresco y sombreado.
  2. Refréscala gradualmente: Moja sus patas, ingles, axilas y cabeza con agua templada (¡nunca helada!). Puedes usar toallas húmedas. No la sumerjas en agua fría, ya que un cambio brusco de temperatura puede ser contraproducente.
  3. Ofrécele agua fresca: Pero en pequeñas cantidades para que no beba demasiado rápido y pueda vomitar.
  4. Acude urgentemente al veterinario: Incluso si parece recuperarse, un golpe de calor puede tener consecuencias internas graves que solo un profesional podrá evaluar y tratar adecuadamente.

Consejos para prevenir el golpe de calor

La mejor defensa es la prevención. Aquí te dejamos algunas precauciones clave para proteger a tu compañero peludo este verano:

  • Nunca dejes a tu mascota sola en el coche: Ni siquiera por unos minutos, aunque las ventanas estén abiertas. La temperatura dentro de un vehículo puede subir a niveles peligrosos en cuestión de minutos, incluso en días nublados.
  • Paseos a primera y última hora: Evita salir a pasear durante las horas centrales del día (entre las 12:00 y las 19:00h). El asfalto quema las almohadillas y el calor ambiental es sofocante.
  • Siempre con agua fresca: Lleva siempre una botella de agua y un bebedero portátil para tu mascota. Asegúrate de que siempre tenga acceso a agua fresca en casa.
  • Proporciona sombra y un lugar fresco: Si está en el jardín, asegúrate de que siempre tenga un área con sombra donde refugiarse y, si es posible, un espacio fresco dentro de casa.
  • Piscinas infantiles y toallas húmedas: Considera una piscina pequeña para perros o mojarle una toalla para que se tumbe si el calor es muy intenso.
  • Cuidado con el ejercicio intenso: Reduce la intensidad y duración de los juegos y el ejercicio.

El verano debe ser una época de disfrute para todos los miembros de la familia, incluidas nuestras queridas mascotas. Con un poco de precaución y atención, podemos asegurarnos de que estén seguras y felices durante los meses más cálidos. Si tienes alguna duda o preocupación, no dudes en consultar a tu veterinario.